La Catedral Metropolitana es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Fue construida entre 1936 y 1946. El estilo arquitectónico del edificio combina armoniosamente elementos de la antigua arquitectura rumano-moldava. Con sus once torres cubiertas de azulejos de colores esmaltados y una altura de 83 metros, es una de las iglesias más grandes de Rumanía. En el sótano de la catedral hay un museo con una extensa colección de arte religioso.